¿CÓMO SE UTILIZA?
- Es recomendable aplicar un sérum, crema u óleo facial para que la piedra se deslice mejor.
- Comenzar relajando los músculos del cuello e ir ascendiendo por mandíbula, pómulos, cejas y frente. Pasar por cada zona un mínimo de 5 veces.
- Colocar uno o dos dedos en el punto de comienzo del masaje (por ejemplo, en la barbilla, aletas de la nariz, nacimiento de las cejas…) y mantenerlos en esa posición sujetando el tejido mientras con la otra mano se desliza la piedra.
- Poner el masajeador gua sha en un ángulo de 45 grados con el rostro y ejercer una presión moderada con movimientos ascendentes. Al llegar a un tramo final (mandíbula, oreja, raíz del pelo…), realizar unos pequeños círculos relajantes.
- La fricción puede enrojecer la piel, pero es un efecto pasajero.
- Es aconsejable masajear el rostro todos los días entre 5 y 10 minutos para mantener los resultados.
- Las piedras pueden guardarse en el frigorífico para ayudar a rebajar la inflamación del rostro.
Esta rutina de masaje facial puede realizarse por la mañana o por la noche, siempre que se tengan unos minutos y se desee disfrutar de un momento de relajación para los músculos y la mente.