Los poros dilatados pueden convertirse en una preocupación estética para muchas personas, pues su obstrucción por acumulación de exceso de sebo, células muertas y partículas de polución promueven la aparición de puntos negros. Por suerte, no se trata de ningún problema cutáneo, pues la secreción de grasa y la renovación celular son procesos naturales de la dermis. Son imperfecciones más habituales en pieles tendentes a generar más sebo, aunque también se da en las secas por deshidratación, donde las glándulas sebáceas actúan como medida de protección. Si bien la reducción total de los poros es inviable porque el tejido no ejercería sus funciones correctamente (secretar sebo, eliminar toxinas, respirar), sí es posible minimizarlos y así hacerlos menos visibles. La clave está en mantenerlos limpios.
La aparición de poros dilatados y obstruidos está causada por diferentes factores, desde genéticos hasta hormonales, pasando por el propio envejecimiento de la piel porque cuando ésta pierde elasticidad y firmeza son más notables. Aunque el motivo más habitual es la acumulación de impurezas, que puede proporcionarles un aspecto más grande y prominente. En el rostro son más frecuentes en la denominada zona T (frente, nariz, barbilla y mejillas). Cuando un poro dilatado se encuentra obstruido su apariencia es más plana y con un tono grisáceo. Cuando está taponado durante mucho tiempo, la exposición al oxígeno hace que se oxide y su apariencia sea negra, y es entonces cuando ya se le denomina punto negro. Ambas circunstancias pueden provocar brotes.
Sabemos que la limpieza es un paso clave en la rutina diaria de cuidado de la piel y que, además, una piel bien exfoliada e hidratada es menos propensa a estos desajustes. Pero como solemos recordar desde Didœ, estos procesos deben hacerse siempre de forma suave y con cosméticos naturales, más afines a nuestro órgano más grande. Hacerlo con productos agresivos puede provocar el efecto contrario al esperado: el tejido se siente agredido, reseco, por lo que vuelve a darse una producción de exceso de sebo. Tener equilibrada la grasa natural de la piel, esencial para una dermis y epidermis sanas, es muy importante.
Ser constante y mantener un hábito de higiene, exfoliación e hidratación facial evitará estos problemas porque minimizar los poros dilatados puede llevar su tiempo. Por eso es esencial adquirir una rutina. Te damos algunos consejos para que la acumulación de impurezas no se convierta en un problema:
• Limpieza facial por el día y por la noche con productos suaves.
• Antes de acostarse dejar siempre la piel libre de maquillaje.
• Exfoliar la piel dos o tres veces por semana.
• Las mascarillas suelen tener efecto astringente y así puede reducirse la apariencia de los poros abiertos.
• No utilizar productos comedogénicos, es decir, que puedan obstruir los poros.
• No usar cosméticos agresivos con la piel, pues pueden resecarla y producir más sebo.
• Proteger a la piel de los daños externos (sol, polución), porque cuando pierde firmeza los poros son más visibles.
• Una dieta saludable y con buenos niveles de hidratación contribuye a una piel más sana.
¿Cuáles son nuestras propuestas de limpieza, exfoliación e hidratación desde Didœ?
• Nuestra Leche desmaquillante revitalizante limpia el rostro de forma suave, lo hidrata y lo regenera.
• Las Muselinas desmaquillantes reutilizables ofrecen un ligero efecto exfoliante y son aptas para su uso en combinación con nuestra leche de limpieza.
• Las esponjas konjac natural y de carbón activo son para uso facial y corporal. Ejercen una suave exfoliación y dejan la piel limpia.
• Nuestra Mascarilla y exfoliante de arroz y pepino ayuda a descongestionar la piel.
• Nuestras cremas contienen aloe vera, que favorece la eliminación de toxinas de la piel y ayuda a reducir los poros abiertos. El Sérum hidratante fluido, en combinación con la acción reguladora de toxinas del té verde, ejerce un doble beneficio de purificación e hidratación.
• La ortiga blanca y la bardana, con propiedades astringentes y depurativas, son la base de nuestra Crema antiedad para piel mixta-grasa.